Algunos trabajos para arreglar fisuras requieren que la piscina este vacía y seca. En este caso en concreto, tuvimos que sanear la zona periférica al sumidero hasta encontrar el lugar exacto de la fuga de agua (agujero negro que aparece en la primera imagen).
Una vez realizada esta operación aplicamos un sellador adhesivo elástico e impermeabilizante para hacer solidario el sumidero junto con las paredes de hormigón.
Seguidamente se colocaron las placas de gresites, no sin antes darle la forma redondeada adecuada. Finalmente, se selló la piscina (se aplicó una resina y mortero de reparación en las juntas) y se dio por finalizada la obra.
Localizamos la fuga
Sellamos la fuga
Empleamos adhesivo elástico e impermeabilizante
Colocamos las placas de Gresite
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